Este tipo de falsificaciones son bien antiguas pues ya en 1905 el Tribunal Supremo los tipificaba
como falsificaciones y no como estafas, aunque se llegaron a considerarlas como burdas por ser
relativamente fácil de detectar.
En la actualidad toman esta denominación un tipo de alteraciones que anteriormente se
encuadraban dentro de las voluntarias y en las mismas, como fraudulentas.
Aunque no sean las más difíciles de detectar, no siempre llegan a hacerse con facilidad, bien por
la propia pericia y habilidad del falsificador, bien por una mala praxis fruto de un exceso de
confianza en el perito. Como siempre y a riesgo de ser reiterativos, el trabajo y examen de los
documentos debe ser metódico y siempre es aconsejable, pese a que no se requiera por quien
ordene el pericial, someter a los documentos a una batería de pruebas como la exposición a
diferentes fuentes e incidencias de luz (incidente, diascópica, UV, IR, etc.) y revisión con
diferentes aumentos.
Índice
Alteraciones Mecánicas en la escritura
Las alteraciones mecánicas serán aquellas manipulaciones de los soportes que contengan
grafismos genuinos mediante el uso de una acción física. Esta acción física se puede hacer con
cuchillas de precisión, realizando cortes y amputaciones al soporte para eliminar grafismos y
poder reescribir otros o alfileres y lijas de grano muy fino para realizar un raspado con el mismo
fin que el anterior. Todos estos supuestos quedarán patentes bajo lente de aumentos y
distinta iluminación; con luz incidente siendo visibles fibras del papel levantadas y con luz
diascópica evidenciándose, al haberse perdido masa del soporte, una diferencia en la
transparencia u opacidad del mismo.
Alteraciones Químicas en la escritura
Al igual que en el caso anterior, aquí, sobre un soporte que contiene grafismos originales, el
falsario media sobre él con el uso de una acción química para manipularlo y reescribir otros
grafismos. Son lo que se conoce comúnmente por “lavado químico”. Los soportes de seguridad
se encuentran tratados para evitar este tipo de acciones o más que para evitarlas, para su
detección una vez realizadas, pues tratado previamente el soporte, al aplicarle el producto, se
desencadenará una reacción fácilmente visible.
Los productos químicos utilizados en las falsificaciones son de lo más variopinto, dependiendo
también del soporte y las tintas sobre las que se vaya a actuar, utilizándose clásicamente los
famosos borratintas totalmente inoperantes en estos días, simplemente acetona para textos
impresos mediante tóner, etc.
Las alteraciones son detectables visualmente bajo distintas fuentes de luz y en soportes de
seguridad, especialmente con luz UV pues la zona del lavado químico presentará diferente
fluorescencia al resto del soporte.
Alteraciones Aditivas en la escritura: Enmiendas y Retoques
Aunque podrían considerarse como el mismo hecho, pues la acción básica es la misma,
sobrescribir sobre un grafismo ya graficado otro, algunos autores, y nosotros nos postulamos en
ese sentido, diferencian ambos hechos de la forma que sigue:
- Enmiendas: Es la reinscripción de un grafismo ya graficado dado que por un descuido del
falsificador ha realizado uno que es identificable como de su persona. - Retoques: El hecho es el mismo pero sin ánimo falsario, realizado únicamente para dar
mejor legibilidad o a causa de un error anterior, aunque debíamos incluir el término por lo
apuntado anteriormente.
Fotomontaje
Aunque apuntamos a la realización de los mismos con ordenador, no es necesario el uso del
mismo, pues también se pueden llegar a realizar fotomontajes con documentos fotocopiados,
realizando sobre un soporte un “collage” con varios documentos y posteriormente fotocopiándolo.
En la fotocopia puede que sea más fácilmente detectable el “collage” originario por la presencia
de “filetes” que son finas líneas negras fruto de la pequeña sombra del borde del papel por no
encontrarse perfectamente pegado sobre el soporte en el que se hace el montaje. Si llega a estar
muy despegado además de la línea, se podrá apreciar una sombra junto a esta.
En los montajes informáticos tendremos que buscar su evidencia en la superposición de los datos
impresos, no apareciendo los que se pusieran en primer lugar en su totalidad, entrecortándose
por los segundos que se superponen, además de poderse poner de manifiesto ciertas tramas en
tonos muy claros en la zona manipulada